Tsunamis, terremotos, ovnis y apocalipsis.

Terremoto en Chile

      Después del terremoto de 8.8 grados en Chile, creímos que ya todo estaba visto. Nos equivocamos y seguiremos haciéndolo, está en el ADN de la especie humana.

Pisando la Luna

      El ser humano, en los últimos 100 años, ha avanzado notablemente. Nos despegamos de la tierra aprendiendo a volar, llegamos hasta las profundidades de los océanos, pudimos escapar de la atmosfera que nos protege y de la gravedad que nos mantiene con los pies pegados a la tierra e incluso el hombre ha llegado a poner su pie en el satélite natural que embellece las noches.

     Cuando creíamos que todo estaba controlado, incluso la fuerza del átomo, la madre tierra nos baja del pedestal de orgullo y desprecio sobre lo natural, volviéndonos a luchar por lo más elemental, comer, dormir protegidos en un hogar o beber el más simple de los elementos, el agua.

Tsunami. Japón

     La insensatez nos lleva a asumir riesgos cada vez mayores. El obtener cada vez más beneficios para unos pocos, nos lleva a los desastres y a la incalculable pérdida de vidas humanas.

     Cada vez que la naturaleza nos baja de golpe de la soberbia, buscamos explicaciones en lo sobrenatural, las creencias religiosas o en aquello que la ciencia conocida no puede explicar. Aún.

Tsunami. Japón

     Leo en Internet que muchos de los espacios que arrasó el tsunami en Japón, eran terrenos ganados al mar. Debido a los movimientos especulativos en la construcción, en un país pequeño pero con una gran expansión demográfica, se empezaron a construir viviendas, fábricas y hasta centrales nucleares en terrenos que el océano vino reclamando como suyos.

Central Nuclear. Japón

     Las centrales nucleares, necesarias para generar la energía de un país altamente industrializado, se hicieron pensando resistir un sismo de 7.5 – 8 grados. En un país sísmico ¿nunca pensaron que podía haber sismos mayores? En especial cuando la experiencia nos dice que ya en Chile, no ahora, sino en 1960, se reporta un terremoto grado 9 - 9.5 (el dato no es exacto porque entonces no se tenía una escala unificada como ahora)

      La respuesta es simple, si se hubieran preparado las centrales nucleares para un sismo grado 9, hubiera salido mucho más caro construirlas. Afán de lucro.

Afectados. Japón

      Los ordenados japoneses, recogen hoy sus pocos enceres que dejó la catástrofe, y buscan a sus fallecidos entre los escombros.

      En Chile, aún decenas de miles intentan reconstruir sus viviendas, un año después.

     La naturaleza no es del todo culpable de los desastres, si bien es cierto, no podemos dominar sus fuerzas, sí podemos prevenir, hasta cierto punto, sus consecuencias. Una alerta de tsunami dada a tiempo, unas construcciones con normativas estrictas y de estricto cumplimiento, prohibición de invadir terrenos expuestos, búsqueda de soluciones energéticas más seguras y menos contaminantes… el rosario es largo, pero siempre topamos con que alguien se quiere embolsar el mayor beneficio y a menor plazo posible.

Tsunami. Chile

     Debiéramos aprender que lo mal hecho y barato, al final sale caro. Los estados debieran poner límites a la avaricia, porque al final la gran mayoría son los que pagan la codicia de unos pocos.

      He escuchado a miles de personas en Chile, decir “Así lo ha querido Dios”. No estoy de acuerdo, primero porque no llegamos al final de la responsabilidades sociales. ¿Qué culpa tiene Dios de que unos ineptos marinos, quitaran la alerta de tsunami, mientras a los humildes habitantes de las costas chilenas, les engullían olas gigantes?

¿Nos mira?

     Segundo, porque con esa mentalidad, de achacarle todos los males a un ser supremo, obviamos la realidad y nos impide crecer como especie desarrollada, aprendiendo de nuestros propios errores.

     Tercero, porque no me creo que, si existe un ser supremo, sea tan malo como para castigarnos de esa manera, más aún, de no castigar solo a aquellos que realmente son culpables de no prevenir lo que ya sabemos que puede ocurrir y no al pobre y humilde. En la tele chilena, vi a un pobre pescador que perdió a su padre y a su único hijo en Constitución por el tsunami, decir “Yo no he sido tan malo para que Dios me castigue de esa manera”.

Profesías Mayas

     No soy persona que crea en teorías apocalípticas, pero la sucesión de terribles catástrofes a nivel mundial en los últimos años, dan que pensar. Hay algo que está sucediendo. Dejemos aparte las catástrofes provocadas por el hombre, como el calentamiento global, la deforestación o la contaminación. Pero en los últimos años los terremotos son cada vez mayores y más largos (antes uno de 6 grados era terremoto, ahora solo es un temblor). Los tsunamis asociados, cada vez más destructivos, las lluvias torrenciales y ciclones, más devastadores y en lugares que antes no se producían, la mayor actividad solar conocida, el mayor acercamiento lunar registrado.

Erupción solar

     La industria del cine explota (para sacar mayores beneficios) las calamidades humanas y ya podemos ver la destrucción hasta en tres dimensiones.

     A todo esto, antes y durante las catástrofes, se han observado, fenómenos inexplicables, como supuestas auroras boreales, luces en los cielos que se comportan de manera totalmente inusual o por lo menos que no se pueden atribuir a lo humanamente conocido.

¿Ovni en Japón?

     Para más, la tecnología de teléfonos móviles, cámaras digitales o cámaras de video, hacen que estos fenómenos queden registrados y no sean solo productos de la imaginación (o la paranoia) particular o colectiva. Es cierto que muchos de estos registros son falsos, pero otros, inexplicablemente ciertos.

¿Nos visitan?

     Hace dos años, en el observatorio de Mamalluca, en Vicuña, norte de Chile, le pregunté a la profesional astrónoma que nos guiaba: “Ustedes que se pasan mirando el cielo y las estrellas, ¿han visto alguna vez algún fenómeno no explicable?” la respuesta fue: “Yo personalmente, no. Pero algunos de mis compañeros, si”. Viniendo de una científica muy preparada, te da que pensar.

¿Están aquí?

      Siempre he creído que no podemos estar solos en el universo, eso sería solo alimentar nuestro propio ego como especie. Si en nuestro pequeño planeta azul se dan las condiciones para la vida superior, ¿Por qué no puede darse en el resto del megalítico universo?

     En algún momento de la humanidad, obligatoriamente, tendremos que contactar con alguna o varias civilizaciones extraterrestres.

     Las preguntas, entonces son, si estamos cercanos a esos momentos y si vendrán a ayudarnos en esta acongojada era o a castigarnos, por haber esquilmado y destruido nuestra pequeña y azul tierra.

    

     Piensen. Pero no se obsesionen.

OVNI Japon

OVNIS Japon

Tsunami Japon

Erupción Solar. Febrero 2011